La limpieza facial profunda se realiza cada 2 meses en dependencia del cutis. La limpieza facial puede tener un tiempo de duración de una hora o más en dependencia de las condiciones del cutis. La limpieza facial profunda tiene varios beneficios, como la eliminación de impurezas, el desbloqueo de los poros, la reducción del exceso de grasa, la estimulación de la circulación sanguínea y la promoción de una apariencia más saludable y radiante en la piel. Además, puede ayudar a prevenir problemas como el acné y mejorar la eficacia de otros productos para el cuidado de la piel que se apliquen posteriormente.