Se necesita más que pasión para crear un auténtico cafecito. Se necesita dedicación una rica historia y más de 143 años de experiencia en el tostado del café. Una tradición que comenzó en Cuba, Café la Llave se tuesta especialmente para lograr el clásico sabor latino, perfeccionado por los amantes del café latino, para los amantes del café latino. Es una tradición familiar que puede saborear.