"El conocimiento de la Historia contemporánea de América Latina, desde el siglo XVII hasta el presente, permite comprender las raíces del estacionamiento económico, la disgregación social y la dependencia política de una vasta región parcialmente atenazada todavía por vinculaciones neocoloniales. Tulio Halperin Donghi describe cómo la inestabilidad gubernamental, los enormes contrastes de riqueza y penuria, la distorsionada especialización en la producción de unas materias primas cuya relación real de intercambio se deteriora continuamente y la explosión demográfica sin creación paralela de puestos escolares y de trabajo caracterizan unos países cuya independencia de los imperios español y portugués en el siglo XIX fue pronto anulada por la política intervencionista de Inglaterra y Estados Unidos."