Macerado en aceite de sésamo La lavanda aporta sus reconocidas propiedades calmantes, ideales para reducir el estrés, la ansiedad y mejorar la calidad del sueño. Conntribuye con una sensación de nutrición y confort, potenciando el efecto relajante. Excelente hidratante, especialmente beneficiosa para pieles secas o irritadas. Las propiedades antiinflamatorias ayudan a calmar la piel, reducir el enrojecimiento y promover la cicatrización. Puede ser usado para el cuidado de las uñas, y cutículas. * Beneficios adicionales: * Puede ser utilizado en masajes para aliviar la tensión muscular y promover la relajación profunda. * Su aroma agradable lo convierte en un aliado para la aromaterapia, mejorando el estado de ánimo y creando un ambiente tranquilo. * Consideraciones importantes: * La calidad de los aceites es fundamental para obtener los máximos beneficios. * Se recomienda realizar una prueba de alergia antes de su uso extendido. * Consultar con un profesional de la salud es aconsejable, especialmente para personas con condiciones médicas preexistentes. En definitiva, el aceite de lavanda macerado en aceite de sésamo es una opción natural y versátil para el cuidado personal y el bienestar general.