El aceite de manzanilla es muy bueno para usarse de forma cosmética, puesto que se potencia sus propiedades cuando se aplica de forma tópica, por ello estos son los usos más empleados. En el caso del cabello, el aceite se puede aplicar directamente en el cuero cabelludo, realizar masajes, dejar reposar y luego enjuagar como normalmente nos lavamos el cabello. Este tratamiento se puede realizar una o dos veces a la semana.