Tienen efecto relajante debido a su contenido de plantas aromáticas, lo cual las hace idóneas para calmar la pesadez en los pies y la inflamación producto al agotamiento. También tiene propiedades antisépticas, no sólo por ser sal marina, sino por la forma en la que se elaboran enriquecidas con aceites naturales y plantas deshidratadas que aportan beneficios a la piel de los pies y ayudan a tratar diferentes afecciones como hongos o el mal olor. Ayudan a sanar pequeñas heridas y rasguños y suaviza la piel. Algunos de los aditivos que tiene son el orégano, la albahaca, el romero, entre otros. Modo de uso: Agregar una cucharada sopera en el agua caliente para que de ésta forma libere los aceites y las propiedades de los deshidratados. Pasados unos 2 minutos atemperar el agua para no dañar la piel de los pies con agua excesivamente caliente. Aquí es importante dejarla lo más caliente que la piel la pueda soportar pero nunca que queme. Lavar los pies previamente antes de ponerlos dentro del recipiente donde se puso la sal. Sumergir los pies por 15 a 20 minutos para que se desprenda la piel muerta y proceder al proceso de lijado, limado y limpieza de los pies. Una vez termine aplique siempre un hidratante.