El porcelanato líquido se puede aplicar directamente sobre cerámicas, hormigón, cemento o superficies porosas, así como crear pisos con efecto 3D.
Es ideal para renovar pisos antiguos, como las baldosas calcáreas, cerámicas dañadas, pisos de granito, carpeta cementicia y contrapiso. Además, el porcelanato líquido al aplicarse por encima de estos pisos deteriorados o antiguos, con diferentes tipos de acabados, genera espacios verdaderamente modernos y sin necesidad de sacar los viejos.