La piel es nuestra barrera protectora contra el efecto del medio ambiente y los radicales libres, y al mismo tiempo es nuestra carta de presentación. Con el paso del tiempo, y si no la cuidamos correctamente, esta se va debilitando, resecando, perdiendo elasticidad y tersura. Es imprescindible utilizar productos que se ajusten a estas necesidades, y que aporten hidratación, nutrición y propicien la regeneración celular.